CON EL SEÑOR RICK ASTLEY TOGETHER FOREVER - 17 septiembre de 2015

"Together forever and never to part,
together forever we two..."

Ay, ¡centrémonos!, que todavía me dura el subidón. En fin, que remato la temporada estival como la empecé: con concierto revival ochentero total.


    Inauguraba el verano en junio de la manera más GOLD con los gloriosos Spandau Ballet, y, casi tres meses exactos después, con Rick Astley, que, con solo veintiún añitos entonces, nos hizo bailar a tope en el 87 con su cara de niño bueno, su tupé pelirrojo y su espectacular voz. Ahora ya es un señor de cuarenta y nueve febreros, pero con la misma carita y esa voz de barítono, ideal para el soul y el funk, todavía más extraordinaria por el paso del tiempo.

Fotos de Nuria Álvarez



Dos momentos escogidos en este vídeo mío.
Disculpad la pobre calidad de sonido e imagen, pero es un recuerdillo más de dos pedazos de canciones.

  Pues eso, nada mejor que buena compañía (gracias, Nuria y Mari Cruz) y música pop única de esa adolescencia que fueron mis mediados ochentas. 



   El señor Astley tuvo un lugar destacado entre las muchas grandes estrellas pop de aquel final de década, sobre todo anglosajonas. En el 88 mi tía Lola me regalaba su segundo disco, este vinilo que conservo como oro en paño, y son incontables las horas de discoteca bailando su sonido tan pegadizo y viendo los vídeos que ponían en aquellas pantallas que había en las discotecas, como en la antigua Inma Park de mi pueblo.



   Después, de la noche a la mañana, y como tantos otros, desapareció, quizás primero porque todo se agota en este mundo y los gustos y generaciones -y la música en general- van cambiando y evolucionando. Pero en el caso de este chico fue porque no le interesaba tanto la fama y el follón alrededor y se dedicó a otras cosas y a la música que él quería hacer, y también a una familia. 
    
   Pero ya en los 2000 un vídeo viral en internet lo saca de nuevo a la luz y, aprovechando el tirón ochentero de tantas glorias que han vuelto a subirse a un escenario, pues se apunta. ¡Y de qué manera!

  Lo del jueves fue un ESPECTÁCULO con mayúsculas, un concierto lleno de fuerza, de ritmo, de canciones que todos hemos cantado alguna vez y nuevos descubrimientos, de versiones de clásicos y de éxitos discotequeros contemporáneos que este pedazo de cantante hace suyas y MEJORA como When I fall in love



   Uptown funk de Mark Ronson con Bruno Mars  


En Málaga, al día siguiente

    y el Get lucky de los Daft Punk, que a mí personalmente la original me pone de los nervios y que, como digo, Rick la hace suya y te parece estupenda.


En Chile el año pasado

  Para colmo, la sintonía, simpatía y complicidad con el público son constantes y la diversión es aún mayor, porque también hay un tono de no tomarse en serio él mismo y quizás por eso se divierte mucho en el escenario y te lo hace pasar a ti mejor. La chica a la que sacó al escenario no podrá olvidarlo seguro.



   Así que al final piensas que se hace demasiado corto, que seguías allí bailando y cantando sin parar. En fin, un auténtico gozo que hizo olvidar el gran retraso del principio por problemas con los amplificadores, que debieron de fastidiar los paquetes de teloneros patrios macarroides que tocaron antes.

  Pero para paquetes, los que al final terminaron por emocionarnos también: los cuatro tíos que tuvimos detrás. Esos típicos amigos de los que, de entrada, piensas tres cosas: una, que habían venido también con sus mujeres, que los habrían dejado a su aire. Dos, florecillas del campo no eran ni parecían, aunque nunca hay que fiarse de las apariencias y el señor Astley tiene mucho predicamento entre el amapoleo, y por ejemplo, vino por la cara en junio al fiestorro del orgullo gay. 



  Pero no, estos ya eran cuarentones como nosotras, de aspecto más bien cavernícola y con sus cubatas ya más que puestos en el cuerpo. Y tres: podían ser fans de Rick, ¿por qué no?

   Respuesta: la tres. Eran ¡los MÁS FANS! y nos dejaron locas cuando empezó el concierto y se sabían TODAS las canciones, que cantaron a pleno pulmón y bailotearon sin parar. El colmo fue que en una que Rick dedicó a su hija, de repente miramos y estaban tres de los maromos abrazados y con lagrimones como puños cayéndoles por la cara. Antes habían estado hablando de sus retoños y atribuimos tanta efusión masculina a esos anteriores cubatas que se habían ventilado. Pero lo cierto es que se emocionaron de verdad y se ganaron nuestro corazón, ¡con la de guerra que dieron al principio!

    En fin, que la fauna, como se ve, fue variada y entregada a la causa totalmente.

 Por lo demás, GENIALES los músicos acompañantes. La corista, espectacular y sublime en especial en ese Cry for help tan maravilloso que se marcaron.



  El MOMENTO DE ALUCINE fue la versión que se marcó a la batería del Highway to hell de ACDC. 


Foto y vídeo de Nuria Álvarez



    Más canciones como Don't say goodbye o The ones you love


Este es de junio de este año en otro sitio, 
pero es tan bonita que la pongo


   O el final en este de 20 minutos donde están los bises con el clásico por excelencia, Never gonna give you up, seguido de la versión de la discotequera Don't you worry, child, de Swedish House Mafia, con la que flipa el chaval que grababa y sus colegas, y Everybody dance, con la que nos echó a nuestra casa. Y ahí ya terminamos de machacarnos las rodillas saltando entre todo ese personal. Que a ver cuándo he bailado yo techno de este. Pero nada, don Rick nos había puesto las pilas y, vamos, que hubiese cantado una muñeira y todo el mundo tan contento. Total, que con el subidón de adrenalina nadie se quería ir, pero... sí, se acabó.


  En fin, lo dicho, que INOLVIDABLE cierre de verano. Y una vez más, qué estupendo recuperar antiguos amores. Si es que no doy abasto, madre mía...


Para más información, la web: RICK ASTLEY 

Comentarios

  1. Ay Mariola has conseguido que el mismo chute de adrenalina del jueves lo haya tenido ahora al leer tu crónica. Redonda, y cargada de sentimiento. Gracias por compartir tantos momentazos especiales de la vida conmigo, y gracias a Rick Astley porque, como tu muy bien dices, sabe disfrutar de la vida y de la música y nos hace disfrutar a todos.
    QUÉ BONITO ERES RICK jajajajaja

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  2. ¡Que se repitan más buenos ratos así!

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  3. Qué buena crónica,estoy muy de acuerdo contigo,Rick mejora las versiones y las hace suyas ❤.Tuve La suerte de asistir a 3 conciertos 👏(Benidorm,Barcelona,España), espero que vuelva pronto 😊,un saludo de una fan de toda la vida 😁

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    1. Gracias a ti por tu comentario, Nati. Fue un conciertazo y además tú lo viste tres veces, así que triple disfrute. Otro saludo.

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